En esta etapa, los docentes y los alumnos de todos los niveles revisamos nuestras herramientas de trabajo, y aunque la mochila sea la misma, ordenamos, desechamos lo que ya no sirve, seleccionamos nuevas cosas que nos pueden acompañar durante el nuevo período y reacondicionamos otras que ya tenemos, simplemente porque queremos que sigan junto a nosotros.

Pero hay una “mochila”, esa que arrastramos con el corazón, donde guardamos muchas experiencias; recuerdos, alegrías y tristezas, triunfos y fracasos, orgullos y vergüenzas. Esta mochila es la que mejor tenemos que preparar - no sólo en la vida académica o institucional - para que este nuevo comienzo sea exitoso y nos prepare para un resto de año mejor que la primera mitad de este.

Todo nuevo comienzo es un enorme signo de interrogación, un desafío, una inquietud, una emoción que está dispuesta para que avancemos sobre ella. Todos, desde los maestros, cada niño, profesores y adolescentes, pasando por los directivos y todos los que hacen día a día al Instituto Superior Pedro Goyena, deberíamos revisar que traemos de nuevo para compartir, qué quisiéramos dejar de lado, qué necesitaríamos mejorar, cuántas ganas y miedos tenemos guardados.

Deseamos a toda la comunidad una exitosa segunda mitad de año, que Dios guie nuestro caminar, y nos dé la fortaleza para dar pasos firmes por el camino que nos tiene preparado, evitando desviar nuestra atención de lo que realmente importa para nuestras vidas, acordándonos del otro que camina junto a nosotros y procurando siempre una sociedad en que reine la paz.

[Fragmentos adaptados de: https://salaamarilla.blogspot.com/2014/03